Hoy os traemos una boda digna de un cuento de hadas.


La recepción se realizó en un precioso castillo sevillano. El día acompañó e hizo una temperatura excelente, lo que permitió que los invitados disfrutasen de las increíbles vistas y los preciosos jardines. 

Los aperitivos se sirvieron en un patio muy sevillano. Los diferentes buffet y el increíble sitting realizado con marca páginas y diminutas llaves hicieron las delicias de los asistentes.

La comida tuvo lugar en el salón señorial, especialmente decorado para la ocasión. La comida, el ambiente y la decoración sorprendieron gratamente a los invitados que no pudieron sino maravillase del entorno.


Una boda preciosa, para unos novios encantadores que nos robaron el corazón.